Vigilia por Malvinas - Comodoro Rivadavia, 2 de Abril de 1982 - Mario Sánchez (1° parte)

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“La suerte de mi país es mi suerte, su dolor es mi dolor y su vergüenza es mi vergüenza”

“Desde hoy contamos para el país una vergüenza menos y una libertad más. Los dolores que nos quedan son las libertades que nos faltan”.(Manifiesto Liminar Reforma Universitaria 1918, Córdoba)

Comodoro Rivadavia, 2 de Abril de 1982

¡¡¡Se recuperaron las Islas Malvinas!!!

Las calles del centro se llenaron de personas aclamando la acción (con el tiempo me di cuenta, que el pueblo no apoyaba a la dictadura ni a la guerra, sino la gesta de recuperar lo que nos perteneció de siempre).

Hasta ayer pasaba desapercibido para la mayoría de mis vecinos, ya que a los colimbas no nos daban bola, mas bien nos desmerecían, nos ignoraban, ahora todo el mundo te saludaba, te abrazaba, te sonreía.

Hasta ayer, escuchábamos a escondidas el rock nacional, que siempre fue de protesta, a los milicos no les gustaba, no representaba a Dios- Patria- Familia, ahora todas las radios y canales de televisión reproducían rock nacional, León Gieco pasó a la vanguardia con “Solo le pido a Dios”.

Estamos en guerra con los ingleses imperialistas, ¡huy! uno que esperaba la baja (ya llevábamos un mes de más en el servicio militar).

¿Cuántos años estaremos incorporados? ¿Tendré que ir al frente? ¿Qué pensarán mis viejos?.

Ellos, que se vinieron desde España escapando de la guerra, donde mi tío Emeterio murió a los 19 años, la misma edad que tengo yo.

Fue dos meses antes que termine la lucha armada y militaba del bando contrario de las ideas de mi abuelo Rufino, el tío murió por Franco y mi abuelo era Republicano.

¡Como se me vino a la mente la película que vimos con el negro Perea!

Se trataba de “Hair” (cabello) un manifiesto hippie en contra de la guerra de Vietnam, donde Berger (Treat Williams) se juega su vida por su amigo Claude Bukowski (John Savage) y sonaba como un mantra el tema: “Deja que el sol entre”.

Pensamientos, recuerdos, injusticias, temores, expectativas, afectos, incertidumbre, las palabras se alborotaban y buscaban un lugar en mi cerebro mientras las emociones lo hacían en mi pecho...